La demanda ya no puede con los altos precios de las casas

Los desorbitados niveles que registran han comenzado a expulsar del mercado a los colectivos con menos
poder adquisitivo.
Desde hace varios meses, diferentes estadísticas como las del Instituto Nacional de Estadística (INE), los
registradores y los notarios han comenzado a reflejar un enfriamiento del mercado de compraventa de viviendas, con ligeras caídas. Los analistas sostienen desde hace tiempo que la fuerte escalada de las transacciones y el imparable crecimiento de los precios se empezarán a frenar en el momento en el que los bolsillos de la demandano puedan hacer frente a las hipotecas. Y ese momento parece que está llegando.
Según el último observatorio inmobiliario de BBVA, aunque el nivel de operaciones se mantiene relativamente elevado, la ralentización en las ventas que ha constatado desde el pasado febrero podría tener su origen, entre otros motivos, en que «el alto nivel de precios que está alcanzando la vivienda podría estar expulsando del mercado a parte de la demanda por restricciones» de su presupuesto.
«Lo que está sucediendo es que mientras los tipos de interés han estado cayendo significativamente en los
últimos años, el aumento del precio de la vivienda se veía compensado por la caída de los tipos y, por tanto, el pago mensual bajaba. Pero en la actualidad, los tipos han dejado de caer (de hecho, el Euribor está subiendo un poco) y los precios crecen incluso más deprisa, lo que hace que el pago mensual esté subiendo y esto, lógicamente, retrae a la demanda», explica Jose García Montalvo, profesor de Economía de la Universidad Pompeu Fabra y uno de los mayores expertos en vivienda de España.
Fin a la «guerra de hipotecas»
Montalvo añade que en la bajada de los tipos de interés que se ha visto en los últimos tiempos ha jugado un papel importante la enorme competencia de los bancos en las hipotecas, que ha llevado a ofrecer tipos de interés mucho más bajos que en el resto de Europa. Pero esa estrategia, avisa, ya se ha detenido en gran parte del sector.
«Tanto Bankinter como BBVA o Santander han reconocido públicamente que esas estrategias de reducción de tipos de interés para ganar volumen eran excesivamente agresivas en algunas instituciones y que ellos no participarían en ese proceso aunque perdieran cuota de mercado. Esto significa que los diferenciales de los tipos hipotecarios tendrán una cierta tendencia a subir, lo que, unido a las bajas expectativas de una caída significativa del Euribor, en el futuro hacen que el aumento de los precios de la vivienda se vaya “comiendo” rápidamente la capacidad de compra de los demandantes», concluye este experto.
Fuente: La Razón